Es hora de limpiar la Casa...
“Quitémonos todo peso que nos impida correr, especialmente el pecado que tan fácilmente nos hace tropezar. Y corramos con perseverancia la carrera que Dios nos ha puesto por delante”. Hebreos 12:1 (NTV).
El cambio real requiere limpiar la casa.
Si eres una de esas personas que no pueden encontrar la motivación para limpiar su casa física, entonces limpiar tu casa espiritual puede parecer una tarea más grande. Pero aquí es donde necesitas usar tu mejor energía, porque Dios quiere que pases tu vida haciéndote más como Él. Y volverse más como Él a veces requiere que hagas cambios difíciles.
La Biblia lo dice así: “Quitémonos todo peso que nos impida correr, especialmente el pecado que tan fácilmente nos hace tropezar. Y corramos con perseverancia la carrera que Dios nos ha puesto por delante” Hebreos 12:1 (NTV).
Para decidir qué necesitas limpiar en tu casa espiritual, solo tienes que averiguar qué necesitas cambiar en tu vida. Hazte preguntas como: ¿Qué me frena?
Si deseas tener un cuerpo saludable, tal vez necesites tener alimentos más saludables en tu casa o crear un plan de alimentación. O tal vez necesites comprometerte a hacer ejercicio con regularidad, incluso si comienzas poco a poco con 15 minutos al día.
Si deseas una mente sana, es posible que debas darte de baja de algunas revistas o bloquear algunos canales. Es posible que solo debas eliminar algunas aplicaciones o poner límites más saludables en torno a tu tiempo de pantalla.
Si deseas un horario saludable, debes decidir qué es lo más importante para ti. Luego, puedes eliminar algunas actividades menos importantes, a veces incluso buenas, para que puedas concentrarte más en lo que más te importa.
Si quieres un corazón limpio, entonces necesitas pasar tiempo en oración, pidiéndole a Dios lo que necesitas confesar y luego confesar esas cosas. Este puede ser el paso más difícil de la limpieza espiritual. A través de la confesión, estás reconociendo y erradicando los pecados que causan hábitos poco saludables en toda tu casa espiritual.
La Biblia dice en Efesios 4:22: “Desháganse de su vieja naturaleza pecaminosa y de su antigua manera de vivir, que está corrompida por la sensualidad y el engaño” (NTV).
Es hora de limpiar la casa, pero no es una práctica única. Al igual que tienes que limpiar regularmente tu hogar físico, debes adquirir el hábito de hacer preguntas difíciles para identificar qué habitaciones espirituales necesitan una buena limpieza. Luego, con la bendición de Dios, te pones a trabajar.
Reflexiona sobre esto:
¿Por qué es importante pasar tiempo en oración antes de tratar de limpiar cualquier área de tu vida?
¿En qué área de tu vida te resulta más difícil hacer cambios?
Pasa algún tiempo hoy hablando con Dios acerca de dónde necesitas hacer algo de limpieza en tu vida. Confiésele su pecado y pídele gracia para hacer el arduo trabajo del cambio.
(Ps. Rick Warren).
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