Dios es Todopoderoso, así que Tú no Tienes que Serlo...

 


“Oh Dios nuestro, ¿no los vas a detener? Somos impotentes ante este ejército poderoso que está a punto de atacarnos. No sabemos qué hacer, pero en ti buscamos ayuda”. 2 Crónicas 20:12 (NTV).

Las oraciones para abrir camino y avanzar en tu vida son diferentes de otras oraciones.

Es probable que a menudo ores y le pidas a Dios Su ayuda, fortaleza o sabiduría. Cuando dices: “Dios, necesito tu ayuda”, eso significa que todavía crees que puedes lograrlo con la ayuda de Dios. ¡Y no hay nada malo con esas oraciones!

Pero cuando haces una oración para abrir camino y avanzar en tu vida, dices: “Dios, no puedo hacer esto. Está más allá de mi capacidad. Necesito que hagas esto porque yo no puedo”. Es la oración que oras cuando te sientes impotente.

Esta oración es en realidad el primer paso del programa de “Celebremos la Recuperación”, que dice: “Me doy cuenta de que no soy Dios; admito que soy incapaz de controlar mi tendencia a hacer las cosas mal y confieso que mi vida es ingobernable”. Luego de centrarte en Dios, este es el segundo paso de una oración para abrir camino y avanzar en tu vida.

Después de que el rey Josafat dirigió su atención a Dios, dijo: “Oh Dios nuestro, ¿no los vas a detener? Somos impotentes ante este ejército poderoso que está a punto de atacarnos. No sabemos qué hacer, pero en ti buscamos ayuda” 2 Crónicas 20:12 (NTV).

Deberías hacer lo mismo cuando estés orando para abrir camino y avanzar en tu vida. Primero, le dices a Dios exactamente cómo te sientes. ¿Te sientes impotente, como si hubieras estado luchando contra algo constantemente sin ningún cambio? ¡Dile a Dios! Dile que te sientes inútil y admite tu debilidad.

No tienes que ser poderoso o saberlo todo si estás conectado con Dios, porque Él es todopoderoso y omnisciente. No tienes que estar en todos los lugares si estás conectado con Dios, porque Él está en todas partes.

¿Qué debes hacer cuando te encuentras en una situación que no puedes controlar, cambiar o manejar? Debes esperar y confiar en todas las cosas que sabes que son ciertas acerca de Dios.

A veces la fe significa no hacer nada. Simplemente te quedas quieto, esperas y confías. Si tratas de hacer algo al respecto, devuelves el control a tu cancha.

Así es como se veía la fe en 2 Crónicas: “Todos los hombres de Judá estaban de pie ante el Señor junto con sus esposas, sus hijos y aun los niños pequeños” 2 Crónicas 20:13 (NTV). Esto no significa que estuvieron de pie durante cinco minutos. Podrían haber estado de pie ante el Señor durante horas. Simplemente de pie, le estaban diciendo a Dios que lo que estaban enfrentando era demasiado grande para ellos. Estaban en el final de sus fuerzas, pero siguieron aguantando, porque confiaron en que Dios proveería.

Cuando necesites abrir camino y avanzar en tu vida, sigue su ejemplo. Espera, observa y confía.

Reflexiona sobre esto:

¿Por qué tiendes a tratar de aferrarte al poder, incluso cuando sabes que no puedes cambiar algo?
¿Qué se ha vuelto inmanejable en tu vida?
¿Qué te dificulta esperar que Dios haga el trabajo que no puedes hacer por ti mismo?

(Ps. Rick Warren).

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