Tres maneras de Afrontar el Desánimo...

“¡No le tengan miedo al enemigo! ¡Recuerden al Señor, quien es grande y glorioso!”. Nehemías 4:14b (NTV)

¿Cómo afrontas el desánimo en tu vida? Siguiendo el ejemplo de Nehemías.

En Nehemías 4, encontrarás tres cosas que puedes hacer para resistir el desánimo.

Reforzar las áreas débiles. Haz una evaluación honesta de dónde eres espiritualmente más vulnerable. ¿Eres más vulnerable a la ira, la lujuria, el orgullo o algo más? ¿Cuáles son tus áreas débiles?

Cuando Nehemías escuchó que sus enemigos querían atacar a los judíos que estaban ayudando a reconstruir el muro en Jerusalén, “Coloqué guardias armados detrás de las partes más bajas de la muralla, en los lugares más descubiertos. Puse a la gente por familias para que hiciera guardia con espadas, lanzas y arcos” Nehemías 4:13 (NTV). Nehemías hizo su tarea. Sabía dónde estaban los puntos más vulnerables de la ciudad y desarrolló un plan.

Tal vez un área de tu vida necesite algo de refuerzo. Para resistir el desánimo, deberás reorganizar y reordenar algunas cosas. ¿Estás endeudado? Reorganiza tu presupuesto. ¿Estás fuera de forma? Reordena tu estilo de vida. No te rindas en tus áreas débiles. En cambio, refuérzalas.

Vuelve a centrarte en Dios. Puedes vencer el desánimo cuando dejas de enfocarte en lo que no quieres que suceda y comienzas a enfocarte en las promesas de Dios. A veces estás tan desanimado como quieres estar o tan feliz como quieres estar. Nadie te obliga a desanimarte.

Cuando Nehemías se dio cuenta de la ansiedad del pueblo, se puso de pie y dijo: “¡No le tengan miedo al enemigo! ¡Recuerden al Señor, quien es grande y glorioso!” Nehemías 4:14b (NTV). Les recordó la bondad y el poder de Dios.

No reproduzcas imágenes desalentadoras en tu mente. En su lugar, elige pensar en Dios. Jonás 2:7 dice: “Cuando la vida se me escapaba recordé al Señor. Elevé mi oración sincera hacia ti en tu santo templo” (NTV).

Defiéndete. ¿Sabías que estás involucrado en una batalla espiritual? La Biblia dice: “¡Estén alerta! Cuídense de su gran enemigo, el diablo, porque anda al acecho como un león rugiente, buscando a quién devorar. Manténganse firmes contra él y sean fuertes en su fe” 1 Pedro 5:8-9a (NTV). No puedes resistir al enemigo con pasividad. Tienes que luchar por lo que sabes que Dios quiere que hagas con tu vida.

Nehemías 4:14b continúa: “¡Luchen por sus hermanos, sus hijos, sus hijas, sus esposas y sus casas!” (NTV). ¿Y sabes lo que pasó después? “Cuando nuestros enemigos se enteraron de que conocíamos sus planes y que Dios mismo los había frustrado, todos volvimos a nuestro trabajo en la muralla” Nehemías 4:15 (NTV). Dios los fortaleció para continuar la obra.

Cuando refuerces las áreas débiles, vuelvas a enfocarte en Dios y aprendas a contraatacar, estarás mejor equipado para resistir el desánimo.

Reflexiona sobre esto:

¿Dónde te sientes más vulnerable hoy? ¿Cuál es el primer paso que puedes dar para reforzar esa área en tu vida?

¿En qué cosas te enfocas que a menudo te llevan al desánimo? ¿En qué atributo de Dios puedes enfocarte en su lugar?

¿Cómo te motiva esforzarte por resistir el desánimo al saber que tienes un enemigo “buscando a quien devorar”?

(Ps. Rick Warren).