Quitemos los estorbos de nuestras Oraciones...
TEXTO: SALMOS 22:1-2 Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has desamparado? ¿Por qué estás tan lejos de mi salvación, y de las palabras de mi clamor? 2 Dios mío, clamo de día, y no respondes; Y de noche, y no hay para mí reposo.
Posiblemente algunos de nosotros en algún momento de nuestra vida cristiana nos hemos sentido igual que David cuando escribió este salmo, nos sentimos desamparados, que el Señor está lejos de nosotros pues clamamos y nuestras oraciones no son respondidas.
Pero verdaderamente tenemos que comprender que Dios nunca nos abandona, que él nunca está lejos de nosotros y que Dios tiene todo el poder para responder a nuestras oraciones, entonces ¿Por qué nuestras oraciones no tienen respuesta?
Seguramente nuestras oraciones están siendo estorbadas por nuestras acciones o por nuestras actitudes, y el Señor está esperando que nosotros reconozcamos nuestro error y lo corrijamos para responder a nuestro clamor.
MUCHAS VECES EL SILENCIO DE DIOS ES UN LLAMADO A REVISAR NUESTRA VIDA, A REVISAR NUESTRO CORAZÓN. es por eso que hoy vamos a comprender por medio de la palabra del Señor cuales pueden ser esos estorbos que están en nuestra vida y que pueden estar afectando nuestra comunión con Dios y también la respuesta a nuestras oraciones.
VEAMOS CUÁLES SON ALGUNOS DE ESOS ESTORBOS:
I) PRIMER ESTORBO: LAS DUDAS EN NUESTRO CORAZÓN (SANTIAGO 1:6-7) Pero pida con fe, no dudando nada; porque el que duda es semejante a la onda del mar, que es arrastrada por el viento y echada de una parte a otra. 7 No piense, pues, quien tal haga, que recibirá cosa alguna del Señor.
La duda es algo totalmente contrario a la fe, pues la duda demuestra que en nuestro corazón hay INCERTIDUMBRE. La incertidumbre es falta de seguridad y falta de confianza sobre lo que ocurrirá en el futuro, es decir que orar con un corazón lleno de duda es como decirle a Dios: “Voy a orar pero seguramente mañana nada va a mejorar, seguramente no recibiré lo que estoy pidiendo.”
Es por eso que el Señor quiere que en nuestro corazón tengamos CERTEZA (Hebreos 11:1) Es, pues, la fe la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve. Es decir, que podamos confiar, que podamos tener seguridad de lo que Dios haráAun a pesar de lo difícil que pueda parecer la situación, pues para nuestro Dios no hay nada difícil (Jeremías 32:27) He aquí que yo soy Jehová, Dios de toda carne; ¿habrá algo que sea difícil para mí?Aun cuando nos parezca que todo esta demasiado complicado de resolver tenemos que confiar que el Señor siempre sabe lo que tiene que hacer, él siempre tiene la respuesta (Juan 6:5-6) Cuando alzó Jesús los ojos, y vio que había venido a él gran multitud, dijo a Felipe: ¿De dónde compraremos pan para que coman estos? 6 Pero esto decía para probarle; porque él sabía lo que había de hacer.
II) SEGUNDO ESTORBO: LA FALTA DE PERDÓN (Marcos 11:25) Y cuando estéis orando, perdonad, si tenéis algo contra alguno, para que también vuestro Padre que está en los cielos os perdone a vosotros vuestras ofensas.
Tenemos que comprender primeramente que orar significa presentarnos delante del Señor ,y tenemos que venir con un corazón humilde, pues la palabra de Dios nos declara que Dios mira de lejos a los altivos (Salmos 138:6) Porque Jehová es excelso, y atiende al humilde, Mas al altivo mira de lejos.
Cuando nosotros nos negamos a perdonar a alguien que nos ha dañado u ofendido estamos siendo soberbios, estamos diciéndole al Señor: “TU YA ME PERDONASTE PERO YO NO ESTOY DISPUESTO A PERDONARLO A ÉL O A ELLA.”
El Señor hoy nos invita a ser humildes y a obedecer su palabra, a perdonar a los que nos han ofendido así como él nos ha perdonado a nosotros.
III) TERCER ESTORBO: EL MALTRATO A NUESTRA ESPOSA (1 PEDRO 3:7) Vosotros, maridos, igualmente, vivid con ellas sabiamente, dando honor a la mujer como a vaso más frágil, y como a coherederas de la gracia de la vida, para que vuestras oraciones no tengan estorbo.
Este punto es similar al anterior, es presentarnos delante de nuestro Dios con soberbia, diciendo “YO QUIERO QUE TU SEAS BUENO CONMIGO PERO YO NO QUIERO TRATAR BIEN A LA ESPOSA QUE ME HAS DADO”
Veamos el texto en la Traducción Lenguaje Actual (TLA) En cuanto a ustedes, los esposos, sean comprensivos con sus esposas. Reconozcan que ellas no tienen la fuerza de ustedes, pero que también a ellas Dios les ha prometido la vida eterna. Si ustedes lo hacen así, Dios escuchará sus oraciones.
Esposos, este mensaje es un llamado del Señor para que comprendamos que si queremos experimentar en nuestra vida la bondad de Dios es necesario que nosotros como cabezas de familia seamos benignos, que actuemos con respeto, comprensión, y bondad con nuestra esposa, para que nuestras oraciones no tengan estorbo.
CONCLUSIÓN: Muchos de nosotros cuando nuestras oraciones no son respondidas levantamos la mirada al cielo buscando una respuesta, pero hoy el Señor nos ha permitido comprender que posiblemente la respuesta no está mirando hacia él sino mirando hacia nuestra propia vida, ahi estan los obstáculos que estan estorbando la respuesta de nuestras oraciones, QUITEMOS HOY ESOS ESTORBOS y permitamos que el poder de Dios fluya a nuestra vida trayendo esa respuesta que tanto anhelamos.
(Ps. Oscar Flores).
Comentarios
Publicar un comentario