Halle a Cristo...

  “Pues, Hay un Dios y un Mediador que puede reconciliar a la humanidad con Dios, y es el hombre Cristo Jesús. Él dio su vida para comprarles la libertad a todos. Este es el mensaje que Dios le dio al mundo justo en el momento preciso”. 1 Timoteo 2:5-6 (NTV). Navidad sin la cruz, es irrelevante. Si Jesús solo se hubiera quedado como un bebé en su pesebre, podrías dejar de leer esto ahora mismo —no tendría sentido. Sin la cruz, no hay razón para gastar un mes completo preparando la celebración de su nacimiento. No tendría sentido poner luces navideñas, tocar música, enviar tarjetas, o comprar regalos. El mundo entero se detiene un día al año para celebrar un día que dividió la historia en dos, A.C. y D.C. Dios vino a la tierra y cambió la historia humana. Y por esto, el mundo nunca será el mismo. Pero no hubiera importado nada sin la cruz. Dios envió a su hijo como el Salvador al mundo para que todas las personas pudieran conocerlo. La Biblia dice, “Pues, Hay un Dios y un Mediador que p

  “El Señor está cerca de los que tienen quebrantado el corazón; él rescata a los de espíritu destrozado”. Salmo 34:18 (NTV). No sé qué dolor estás pasando en esta Navidad. No conozco lo que causó ese dolor. Pero sé que Dios sí lo sabe, y lo entiende. Dios no es una fuerza distante. Tampoco es insensible. La Biblia enseña que Dios se involucra en nuestro dolor. Y no solo le interesa tu dolor; también lo siente. Él comparte tu dolor. La Biblia dice: “El Señor está cerca de los que tienen quebrantado el corazón; él rescata a los de espíritu destrozado” Salmo 34:18 (NTV). Puedo saber esto aunque no conozco nada de tu dolor. ¿Por qué? Porque conozco a Dios. Y conozco la Trinidad –Padre, Hijo y Espíritu Santo. Cada parte de la Trinidad está activa en tu vida mientras experimentas dolor. Primero, tu Padre celestial comparte tu dolor. Dios entiende y comparte tu dolor porque Él te formó. Dios es quién te dio la habilidad de experimentar placer y dolor. La Biblia lo dice de esta manera: “Él es

  “Pero a todos los que creyeron en él y lo recibieron, les dio el derecho de llegar a ser hijos de Dios”. Juan 1:12 (NTV). Enciende tu televisor o navega en el internet en esta Navidad, y descubrirás todo tipo de mensajes de Navidad. Pero para el que inventó la Navidad —Dios— sólo hay un mensaje que realmente importa. Dios quiere compartir la eternidad contigo. De eso es lo que se trata la Navidad. No fuiste creado sólo para vivir 80 o 90 años en la Tierra y luego morir. Eres mucho más valioso que eso para Dios. Dios tiene algunos planes a largo plazo para ti. Él te hizo para vivir por siempre. Un día tu corazón se detendrá. Ese será el final de tu corazón pero no será tu fin. ¡Vas a vivir eternamente —miles de millones de años! Y Dios quiere que seas parte de su familia. Dios envió a Jesús a la Tierra para que naciera y un día muriera por tus pecados y entonces puedas estar por siempre con Él. Esta es la gran noticia de la Navidad. Este ofrecimiento está disponible para todas las per

  “Con generosidad le darás, y no te dolerá el corazón cuando le des, ya que el Señor tu Dios te bendecirá por esto en todo tu trabajo y en todo lo que emprendas”. Deuteronomio 15:10 (LBLA). Dios quiere bendecir tu vida. Él ha creado el universo para que vivas la vida plena que Él quiere y seas bendecido cuando sigues sus mandamientos. La Biblia dice una y otra vez: Dios bendice a los que son generosos. Mira este versículo: “Con generosidad le darás, y no te dolerá el corazón cuando le des, ya que el Señor tu Dios te bendecirá por esto en todo tu trabajo y en todo lo que emprendas” Deuteronomio 15:10 (LBLA). ¿Quieres que Dios bendiga tu trabajo? ¿Quieres que Él bendiga todo lo que emprendas? ¡Por supuesto que sí! Entonces no seas avaro. No seas egoísta. Se generoso —con tu tiempo, tus elogios, tu dinero y tu energía. Se generoso en cada área de tu vida. Considera esto: Puedes creer en las promesas de Dios o pensar que Él está mintiendo. Realmente no hay otra alternativa. Encontrarás má

“Y Jesús le dijo: —Puedes irte, pues tu fe te ha sanado. Al instante el hombre pudo ver y siguió a Jesús por el camino”. Marcos 10:52 (NTV). No sé qué paso debes dar a continuación, pero sí sé que debes tomarlo. Tu próximo paso puede ser aceptar a Jesucristo en tu vida o ser bautizado. Tal vez necesites unirte a una iglesia, formar parte de un grupo pequeño, diezmar, encontrar un ministerio, ir a un viaje misionero o invitar a un amigo a la iglesia. No sé cuál es tu próximo paso, pero sí sé esto: tienes uno. Dios nunca terminará de llevarte más profundamente en la fe. Siempre hay un siguiente paso. Si no das el siguiente paso, te quedarás estancado en una zanja. Y la única diferencia entre una tumba y una zanja es la longitud. Si no avanzas en la fe, morirás. Tu corazón se enfriará, y te sentirás más distante de Dios. Él no te va a ayudar con los pasos dos, tres, cuatro o cinco hasta que no des el paso uno. Si le estás pidiendo a Dios que te ayude con algo, es posible que Él te esté pr

  “—¿Qué quieres que haga por ti? —preguntó Jesús. —Mi Rabí—dijo el hombre ciego—, ¡quiero ver!”. Marcos 10:51 (NTV). Cuando Dios te da una meta, debes hacerla pública. Debes anunciar tu intención. Hablar del cambio que deseas hacer en tu vida. Explicar lo que te está pidiendo Dios que hagas. Tienes que decirle a todo el mundo, porque una fe secreta es una fe superficial. Ayer, vimos la historia de Bartimeo, un hombre que era ciego y se encontró inesperadamente con Jesús. Cuando se dio cuenta de que Jesús estaba cerca, gritó para llamar su atención. Demostró su fe públicamente. Marcos 10:51 registra la respuesta de Jesús: “—¿Qué quieres que haga por ti? —preguntó Jesús. —Mi Rabí—dijo el hombre ciego—, ¡quiero ver!” (NTV). ¿Por qué hizo Jesús esta pregunta en particular? Seguramente él ya sabía lo que el hombre necesitaba. El hombre era ciego, una condición que, en ese tiempo y cultura, lo convirtió en un paria con pocas opciones más que pasar sus días mendigando. Aun así, Jesús se acer

  “Jesús le dijo: —No se puede pertenecer al reino de Dios y hacer lo mismo que hace un mal campesino. Al que se pone a arar el terreno y vuelve la vista atrás, los surcos le salen torcidos”. Lucas 9:62 (TLA). En Marcos 10, una gran multitud seguía a Jesús cuando salía de Jericó. Un hombre llamado Bartimeo estaba ciego y mendigaba al borde del camino. Cuando Bartimeo escuchó que Jesús estaba cerca, comenzó a gritar: “¡Jesús, Hijo de David, ¡ten compasión de mí!” Marcos 10:47 (NVI). Cuando Bartimeo se había levantado esa mañana, no tenía idea de que Jesucristo iba a pasar junto a él ese día. Pensó que era un día cualquiera: el mismo lugar, el mismo grito de auxilio, la misma situación. Pero de repente Jesús estaba allí. Bartimeo no tuvo tiempo de preparar o pensar en su respuesta. Fue solo una oportunidad que cayó en su regazo. Y optó por aprovechar el momento. Decidió no retrasar ni posponer las cosas. Iba a hacerlo… ahora. Esa es también la primera clave para un nuevo comienzo en tu v

  “¡Gloria a él en la iglesia y en Cristo Jesús por todas las generaciones desde hoy y para siempre! Amén” Efesios 3:21 (NTV). Durante los últimos días, hemos visto cómo puedes glorificar a Dios. Una de las mejores maneras en que puedes mostrar la gloria de Dios es uniéndote a la familia de Dios, la iglesia. La Biblia dice en Efesios 3:21: “¡Gloria a él en la iglesia y en Cristo Jesús por todas las generaciones desde hoy y para siempre! Amén” (NTV). ¿Sabías que la familia de Dios es lo único que va a durar por la eternidad? Dentro de mil años, si la Tierra todavía está aquí, no habrá Microsoft. No habrá Hollywood. No habrá ninguna de las cosas a las que estamos acostumbrados hoy. De hecho, la Biblia promete que incluso el Cielo y la Tierra como los conocemos hoy no durarán para siempre; un día habrá un Cielo y una Tierra nuevos. Pero todavía habrá la familia de Dios. Cuando todo lo demás se haya ido, la iglesia de Dios permanecerá. Si la familia de Dios es lo único que durará para siem

  “Dios, de su gran variedad de dones espirituales, les ha dado un don a cada uno de ustedes. Úsenlos bien para servirse los unos a los otros”. 1 Pedro 4:10 (NTV). Cuando todos usamos nuestras habilidades para ayudarnos unos a otros, Dios es glorificado. La Biblia dice: “Dios, de su gran variedad de dones espirituales, les ha dado un don a cada uno de ustedes. Úsenlos bien para servirse los unos a los otros” 1 Pedro 4:10 (NTV). Dios te preparó para poder hacer una contribución. Él no te dio talentos y habilidades para tu propio beneficio. Son para el beneficio de otras personas. Y, a su vez, los talentos de otras personas son para tu beneficio. Estoy muy agradecido por las personas que son talentosas en áreas donde yo no lo soy. Por ejemplo, estoy agradecido por los contadores, ¡porque soy pésimo en la contabilidad! Y estoy agradecido por las personas que tienen habilidades mecánicas. No podría arreglar un carburador si tuviera que hacerlo. ¡Ni siquiera sabría dónde está! Todo el mundo

  “Acéptense unos a otros, tal como Cristo los aceptó a ustedes, para que Dios reciba la gloria”. Romanos 15:7 (NTV). ¿Sabías que cada vez que demuestras amor, le das gloria a Dios? Así es como funciona. Cada vez que muestras cómo es Dios, le das gloria. Y Dios es amor. Entonces, cuando amas, muestras la gloria de Dios. Dios dice: “Yo soy amoroso. soy compasivo Quiero que seas como yo. Quiero que desarrolles mi carácter”. Nunca vas a ser Dios. Pero Dios quiere que te vuelvas piadoso. Quiere que desarrolles su carácter, de tal padre tal hijo, de tal padre tal hija. Él quiere que aprendas a amar a las personas como Él las ama. Hay muchas maneras de amar como Dios lo hace. Una manera de amar a otras personas es aceptándolas. Romanos 15:7 dice: “Acéptense unos a otros, tal como Cristo los aceptó a ustedes, para que Dios reciba la gloria” (NTV). Dios quiere que aceptes a todos, pase lo que pase. ¿Significa eso que tienes que aprobar todo lo que hacen? ¡Por supuesto que no! Hay una diferenci

  “Pues el reino de Dios no consiste en las muchas palabras sino en vivir por el poder de Dios” 1 Corintios 4:20 (NTV). Para vivir una vida plena, debes vivir por el poder de Dios. La Biblia dice en 1 Corintios 4:20, “Pues el reino de Dios no consiste en las muchas palabras sino en vivir por el poder de Dios” (NTV). ¿Sabías que Dios no bendice a las personas autosuficientes? Bendice a las personas que dependen de Él y se entregan a Él. Dios quiere usarte, pero insiste en que vivas por Su poder. Efesios 3:20 dice: “Ahora que toda la gloria sea para Dios, quien puede lograr mucho más de lo que pudiéramos pedir o incluso imaginar mediante su gran poder, que actúa en nosotros” (NTV). A través de su poder, Dios puede hacer más en ti y a través de ti de lo que puedas imaginar. Entonces, ¿cómo obtienes el poder de Dios en tu vida? Hay tres maneras: Obtienes el poder de Dios al orar. Si no tienes ningún poder en tu vida, eso podría significar que no estás orando. La oración y el poder van junt

  “Lleven una vida que Dios considere digna. Pues él los llamó para que tengan parte en su reino y gloria”. 1 Tesalonicenses 2:12 (NTV). Hablo con personas todo el tiempo que me dicen: “Tengo tanto y, sin embargo, me siento insatisfecho. Tengo una buena familia, un buen trabajo y buenos amigos. Soy parte de una gran iglesia. Entonces, ¿por qué me siento tan insatisfecho? Mi respuesta es: ¡Es porque fuiste hecho para más que esto! Fuiste creado para algo más que sobrevivir. Hasta que comiences a vivir en el Reino de Dios, por el poder de Dios y para la gloria de Dios, nunca encontrarás la realización en la vida. ¿Cómo vives una vida plena, el tipo de vida que Dios te diseñó para vivir? La Biblia dice en 1 Tesalonicenses 2:12: “Lleven una vida que Dios considere digna. Pues él los llamó para que tengan parte en su reino y gloria” (NTV). ¿Qué significa vivir en el Reino de Dios? Significa que haces de la agenda de Dios tu agenda. Tú haces de la voluntad de Dios tu voluntad. Te preocupas p

  “Es mejor ser dos que uno, porque ambos pueden ayudarse mutuamente a lograr el éxito. Si uno cae, el otro puede darle la mano y ayudarle; pero el que cae y está solo, ese sí que está en problemas”. Eclesiastés 4:9-10 (NTV). Dios nos creó para que necesitáramos a otras personas. Nos necesitamos unos a otros para liberarnos de nuestras heridas, hábitos y complejos. Entonces, si realmente quieres liberarte de la tentación, necesitarás el apoyo de los demás. De hecho, una vez que entiendas que no puedes cambiar por tu cuenta, serás libre de ver cómo Dios ya está trabajando para transformar tu vida. Y verás cómo utiliza a otras personas para ayudarte a cambiar. La verdad es que nos necesitamos unos a otros para crecer. A veces, lo que menos quieres es lo que más necesitas. Así que necesitas un amigo para rendir cuentas y necesitas un grupo que te apoye. La Biblia dice en Eclesiastés 4:9-10, “Es mejor ser dos que uno, porque ambos pueden ayudarse mutuamente a lograr el éxito. Si uno cae, e

  “Capturamos los pensamientos rebeldes y enseñamos a las personas a obedecer a Cristo”. 2 Corintios 10:5 (NTV). Aquí está el secreto de la tentación: no luches contra ella. Solo reenfoca tu pensamiento. Todo lo que resistes persiste. ¿Sabías que, en la Biblia, ni una sola vez se te dice que resistas la tentación? Se te dice que resistas al Diablo, pero ese es un tema completamente diferente. La clave para vencer la tentación es no retroceder. Es cambiar tu enfoque. Lo que llama tu atención te atrapa. La batalla por el pecado siempre comienza en la mente. Por eso la Biblia dice en el Salmo 119:6, “No tendré que pasar vergüenzas cuando considere todos tus mandamientos” (NVI). ¿Por qué? Porque si estás pensando en la verdad de Dios, no estás pensando en cosas menos importantes. Es cierto en cada área de la vida, buena o mala. Si te enfocas en las cosas piadosas, te llevarán en una dirección piadosa. Si te enfocas en las cosas que ves en la televisión y en las redes sociales, te llevarán

  “¡Llámame cuando tengas problemas! Yo vendré a salvarte, y tú me darás alabanza”. Salmo 50:15 (TLA). ¿Alguna vez te has sentido solo cuando estás luchando contra la tentación? ¡Tú no estás solo! La Biblia dice que Dios está listo para ayudarte. En la Biblia, Jesús te da una oración de liberación para usar cuando eres tentado. Él te dice que ores: “No nos dejes caer en tentación, sino líbranos del maligno” Mateo 6:13 (NVI). A menudo acortamos esa oración a una sola palabra: ¡Ayuda! Las oraciones no tienen que comenzar con palabras elegantes como “nuestro misericordioso Padre celestial”. Cuando necesites ser libre de la tentación, puedes ir directo al grano: “¡Ayuda! Mantén mis ojos bien abiertos” o “¡Ayuda! No me gusta cómo me trata mi pariente y lo voy a ver hoy” o “¡Ayuda! ¡Todo en mí quiere vengarse de esa persona! La Biblia está llena de personas que oraron por liberación, como David, Daniel, Ester, Pedro y Pablo. Dios estaba allí para ayudarlos, y también te ayudará a ti. De hech

“Sabemos que nuestra vieja naturaleza fue crucificada con él para que nuestro cuerpo pecaminoso perdiera su poder, de modo que ya no siguiéramos siendo esclavos del pecado”. Romanos 6:6 (NVI). Jesús rompió el poder del pecado en la cruz. Romanos 6:6 dice: “Sabemos que nuestra vieja naturaleza fue crucificada con él para que nuestro cuerpo pecaminoso perdiera su poder, de modo que ya no siguiéramos siendo esclavos del pecado” (NVI). Esta es una gran noticia, especialmente porque nuestra inclinación natural es hacer lo incorrecto. Es nuestra inclinación natural humana lastimar a otros cuando nos lastiman a nosotros. Si alguien dice algo malo sobre ti, quieres decir algo malo sobre ellos. Tendemos a aferrarnos a las heridas y luchamos por perdonar. Pero puedes romper esa atadura a la amargura, la culpa, el resentimiento y la preocupación. Puedes evitar convertirte en esclavo del pasado y de los recuerdos dolorosos. Puedes elegir perdonar. ¿A qué dolor te aferras? Permíteme hacerte una pre