Dios Fortalece tu Fe en seis fases...

 

“Para el que tiene fe, todo es posible”. Marcos 9:23 (BLPH).

La Biblia dice en Mateo 9:29, “Que se haga con ustedes conforme a su fe“ (NVI). Esa es la clave de la gran aventura de seguir a Jesucristo. Dios dice: “Tienes la oportunidad de elegir cuánto quieres que bendiga tu vida. Tú crees, y lo haré. Tú crees, y yo te bendeciré”.

La fe es como un músculo —que se desarrolla. Se puede fortalecer o puede debilitarse, dependiendo de cuanto lo utilices. Entonces, ¿cómo Dios construye tu fe? Se utiliza un proceso muy predecible. Si tú lo entiendes, puedes cooperar en el proceso.

En primer lugar, Dios te da un sueño para tu vida. Entonces, tú tienes que tomar una decisión al respecto. La tercera etapa es la demora, donde tú esperas que Dios obre en su tiempo. La siguiente etapa es la dificultad, donde Dios te pone a prueba. Entonces, es posible llegar a un callejón sin salida, lo que hará que desees abandonar. Pero, al final, Dios siempre te lleva a la liberación, a la etapa final de tus seis fases de fe.

Como pastor, probablemente la pregunta que me hacen más que cualquier otra es, “¿Por qué me está pasando esto a mí? Yo no lo entiendo”. Cuando tú no entiendes las seis fases de fe de Dios, los pasos que Él utiliza para construir tu carácter, te desanimas. Tú puedes resentirte. Sin duda te preocupas. Es posible que te hagas temeroso por el futuro o te deprimas. Y, sobre todo, tú no puedes cooperar con lo que Dios está haciendo cuando tú no entiendes el proceso por el que Él te está llevando. Pero cuando entiendes las seis fases de fe, entonces puedes decir, “Oh, estoy en la etapa 4 en este momento” o en la etapa 6 o la etapa 2. Entiendes mejor la obra que Dios hace, y no te desalientas cuando los tiempos se ponen difíciles.

Marcos 9:23 dice: “Para el que tiene fe, todo es posible” (BLPH).

¿Quieres tener una fe más firme a medida que avanzas en esta gran aventura con Dios? Primero tienes que entender las seis fases de la fe a través de las cuales Dios te lleva, para que no te desanimes cuando no ves resultados o no tienes las respuestas de inmediato.

Reflexiona sobre esto:

¿Por qué crees que Dios quiere que nuestro crecimiento espiritual dependa tanto de cómo trabajamos para ello?
¿En qué etapa de la fe, crees que Dios te está ayudando a atravesar en este momento?
¿Cómo vas a responder a lo que Dios está tratando de enseñarte en esta etapa o la manera en que tú estás siendo puesto a prueba?

(Ps. Rick Warren).

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